miércoles, 20 de junio de 2012

El rescate de la banca francesa, italiana y alemana


"Algunos bancos deben aumentar sus recursos propios para asegurar la confianza en los mismos de sus acreedores y depositantes. Sin estos recursos adicionales, los bancos en cuestión podrían tener problemas en acceder a los mercados de financiación y, como consecuencia, se verían obligados a reducir sus balances y el crédito a la economía real". Este comentario fue realizado por Christine Lagarde en septiembre de 2011 refiriéndose a la banca europea, no sólo a la española.

El FMI realizó sus propias pruebas de estrés, basándose en la información disponible de la Autoridad Bancaria Europea (EBA), en los efectos secundarios para los bancos de las tensiones en los mercados de bonos y en la cotización de los Credit Default Swaps (CDS) de los distintos países. Como resultado del análisis, el FMI consideró que la banca europea necesitaba 300.000 millones de euros de recursos adicionales para hacer frente a un posible empeoramiento de la situación económica. Desde entonces, la situación lejos de mejorar, ha empeorado. Por tanto, dicha cifra estimada de recursos necesarios difícilmente se habrá reducido.

La línea de crédito de hasta 100.000 millones de euros para recapitalizar la banca española pone de manifiesto que, al menos en lo referente al sistema financiero, el FMI no andaba muy descaminado. Suponiendo que finalmente sean necesarios 70.000 millones de euros para los bancos españoles, todavía quedan por asignar 230.000 millones de euros de capital a inyectar a otros bancos europeos en situación análoga a la de los bancos españoles necesitados de capital.

En los veranos de 2010 y 2011, la Autoridad Bancaria Europea (EBA) realizó sendos test de estrés a los principales bancos europeos. Algunos países, como España, sometieron al examen a la casi totalidad de su sistema financiero. Otros países, como Alemania, apenas presentaron a entidades que representan el 50% de su sistema bancario, incluso retirando del examen a una entidad (Helaba Bank) días antes de conocerse el resultado ante la certeza de que no superaría la prueba.

Los test de estrés se basan en analizar cómo afectaría a la solvencia de los bancos un elevado deterioro económico, considerando determinadas variables como: caída PIB, aumento paro, caída bolsas y bonos ... En los dos test de estrés realizados, el banco central de cada país utilizó sus propias hipótesis de deterioro económico. Visto lo visto, queda claro que los test de estrés fueron un fracaso, pero al menos se aplicaron a todas las entidades sistémicas europeas.

En esta ocasión, el análisis empleado para calcular la cantidad de recursos que cada banco español necesitará se basa en unas pruebas de estrés que sólo se aplican a la banca española, y no al resto de la banca europea.

Que otros bancos europeos tengan problemas de solvencia no soluciona ni mitiga la situación de la banca española. Pero si el FMI tenía razón en septiembre pasado, y todo apunta a que así es, el mismo sistema empleado para recapitalizar las entidades más débiles de la banca española, un 30% del total del sector, no tardará en ser empleado para capitalizar entidades de Italia, Francia y Alemania. Hoy el foco está en la banca española, pero el resto de la banca europea no está en condiciones de sacar pecho.

Como siempre, cuanto más tiempo se tarde en concretar los detalles de la línea de crédito al FROB para recapitalizar a la banca, más inestabilidad habrá. Diez días después del anuncio del rescate bancario, siguen sin concretarse los detalles del mismo. El resultado de dicha incertidumbre es la total inestabilidad de los mercados financieros. Los tiempos políticos no son los de los mercados financieros, pero cada día que transcurre sin concreción de las medidas, el coste de la deuda sube. Mientras tanto, el BCE lleva 14 semanas sin comprar un euro de deuda pública europea en el mercado secundario.

Jesús Sánchez-Quiñones
Director General de Renta 4 Banco

lunes, 18 de junio de 2012

Todas las opciones abiertas


A fines de mayo habíamos hablado de cuatro semanas decisivas para la supervivencia del euro y para el encauzamiento de los complejos problemas, no solo económicos sino esencialmente políticos e institucionales, que desde hace tiempo arrastra la zona euro. Visto desde hoy, y cuando han pasado ya tres de esas cuatro semanas, es claro que nos quedamos cortos y que harán falta bastante más que cuatro semanas más para empezar a ver una cierta luz, si es que al final la hay.

Lo que de momento ha quedado claro estas últimas semanas es que hay una creciente divergencia entre la postura alemana y la de los restantes socios del euro. Una divergencia que ha llevado a decir a Merkel el pasado viernes que "Alemania tiene sus limitaciones" y que nadie debe esperar que Alemania cargue sobre sus hombros los problemas de los demás, porque, aunque quisiera, no tiene fuerzas suficientes. Todo un aviso para quien lo quiera escuchar.

Visto desde otra perspectiva, tras tres semanas en las que entre otras cosas se ha dado ayuda financiera a España para su banca y en las que se ha hablado abiertamente de avanzar en la "unión bancaria", lo cierto es que la partida de ajedrez que desde hace tiempo se está jugando en la zona euro sigue jugándose. Lo cierto es, además, que en esa partida cada uno sigue queriendo jugar sus cartas, sin que nadie renuncie a casi nada, por lo que la confusión y el desconcierto van a más.

Con esa confusión y con ese desconcierto entramos en una semana en la que la prueba de Grecia no va a depender tanto del resultado de las elecciones, que no ha sido malo, sino de la respuesta que den a ese resultado los líderes europeos. Una respuesta que servirá de precedente, y en su caso de ejemplo a seguir, para otros. Se va a poner a prueba el modelo alemán de austeridad más reformas estructurales, y los límites o ausencia de límites que una economía "intervenida" como es la griega, puede llegar a tener. Si el modelo funciona en Grecia puede servir de guía para otros casos.

Vamos a ver, de verdad, y con Grecia de fondo, hasta dónde llega la firmeza de la posición alemana y hasta dónde llega la capacidad de presión de Francia, una Francia posiblemente abocada en unos meses a entrar en una dinámica de deterioro financiero que la puede llevar a ser el verdadero elefante en la habitación.

Es curioso que las Bolsas hayan estado más o menos bien estos días pasados, siendo así que los bonos soberanos periféricos se han comportado muy mal. El pasado lunes las Bolsas se dispararon a primera hora celebrando el rescate financiero a la banca española. Luego se desinflaron a lo largo de la sesión, pero en las siguientes sesiones las Bolsas han aguantado bien, incluso el jueves, con el tipo del bono del Tesoro español al 7%, con el Tesoro italiano emitiendo a tres años al 5,3% y con el bund, que ya había iniciado la corrección la semana pasada, desplomándose tras afirmar un gran inversor institucional que iba a vender sus posiciones en el bono del Tesoro alemán.

El Ibex 35 ha cerrado la semana con una subida del 2,5%, el Eurostoxx 50 ha subido un 1,7%, el Dax el 1,6%, y el S&P casi el 1%.

Una de las claves de estas subidas ha sido que las Bolsas esperan más ayudas monetarias de los Bancos Centrales. Unas ayudas que hasta ahora han sido claves y que se piensa volverán a serlo. La FED se reúne esta semana y la idea es que puede renovar en julio la operación twist. Del BCE se espera que inyecte dinero a las economías en problemas, por la vía de los préstamos bancarios o de las compras de deuda soberana en mercados secundarios. Las Bolsas esperan esa ayuda y suben. Pero no hay ninguna seguridad en lo que vaya a pasar, es decir, todas las opciones están abiertas.

Si miramos el cuadro básico de indicadores vemos que el bund alemán, como ya hemos dicho, ha recortado fuertemente su precio y su tipo de interés, que es un indicador del miedo, ya que el bund es el bono refugio por excelencia de la zona euro, ha subido al 1,5%, es decir, indica menos temor a una ruptura del euro. A la vez, las Bolsas han subido esta semana y vemos al futuro del S&P en 1.338 puntos, lejos de los niveles críticos de la semana anterior. El Eurostoxx ronda los 2.200 puntos y el Dax ha aguantado bien por encima de los 6.000 puntos. El oro ha subido hasta situarse por encima de los 1.600 dólares la onza y el euro ha rebotado frente al dólar.

Todo esto nos indica cierta tranquilidad, pese a que las noticias y el ruido ambiental sugieran curiosamente todo lo contrario.

Entramos en una semana con reunión de la FED, con digestión del resultado de las elecciones griegas y con reuniones preparatorias de la cumbre de la zona euro del 28 de junio. Los grandes problemas siguen ahí, sin resolverse, y la economía global sigue débil. Pero el inversor parece confiar nuevamente en los Bancos Centrales, tal vez pidiéndoles más de lo que pueden hacer, pero intuyendo que solo puede confiar en los Bancos Centrales a la vista de las estériles cumbres de los líderes políticos.

La semana pasada apostábamos por alzas moderadas, que efectivamente se han producido. Esta semana apostamos por unas Bolsas estables, incluso nuevamente con alzas moderadas, favorecidas por el comunicado de la FED y por la ayuda del BCE, en un escenario de compás de espera, en el que no se ve avance alguno en la solución de los problemas de fondo, pero en el que a corto plazo ninguno de los líderes políticos desea romper de forma violenta con los demás, por lo que todos se han vuelto esclavos de sus propias actuaciones y cada uno espera que el tiempo juegue a su favor.
Juan Carlos Ureta
Presidente de Renta 4

miércoles, 13 de junio de 2012

¿Cómo nos afecta la Renta Fija?

El Aula Leonesa de Inversión, en la que participan Renta 4, la Cámara de la Propiedad Urbana y La Crónica de León, organizó ayer un nuevo evento con un gran éxito de público. En esta ocasión, Miguel de Juan, asesor del fondo de inversión Argos, ofreció una conferencia bajo el título ‘¿Cómo nos afecta la Renta Fija?’.

De Juan, que cuenta con una amplia experiencia profesional en las principales entidades y empresas del sector de la inversión en León, comentó la importancia de la Renta Fija, las oportunidades y las diferentes opciones que hay para invertir en este producto estos momentos. Una alternativa que comentó, cuenta con garantías y “puede ser muy atractiva para un buen número de inversores” a través de fondos de inversión y otros productos financieros.
Durante la conferencia De Juan también comentó cómo afecta la prima de riesgo a la deuda soberana. Un tema de gran actualidad debido a la situación y crisis financiera que atraviesa España y que ha disparado la prima de riesgo con la que se calcula el interés de la deuda pública que emite el Gobierno.


El experto también trató el polémico asunto de las participaciones preferentes que ha provocado en las últimas semanas protestas de muchas personas que se consideran engañadas por las entidades. A este respecto, De Juan explica que “muchos inversores muy conservadores firmaron este tipo de producto desconociendo los riesgos que tenía”. La causas, según De Juan, hay que buscarlas en la facilidad de financiación que las “entidades financieras encontraban con las preferentes, un producto que sacó al mercado gran parte del sector financiero y que provocó una campaña para hacerse con inversores sin contar todos los riesgos ni la letra pequeña que tenían las preferentes”.


Una polémica que ha provocado que entidades como España-Duero ofreciera la semana pasada a los inversores que poseen títulos de participaciones preferentes u obligaciones subordinadas un cambio por depósitos tradicionales de ahorro por la totalidad del importe nominal adquirido. Unos productos sustitutivos que son, en la mayoría de los casos depósitos a plazo fijo.



(Fuente: J.J. Porras/ La Crónica de León)





En el siguiente vídeo, Miguel Ángel Cercas, Director de Renta 4 Banco, le realiza una entrevista a Miguel de Juan, momentos antes de comenzar el seminario:




lunes, 11 de junio de 2012

Primeras pruebas superadas


Tras la semana anterior, que había tomado la peor de las derivas posibles, hemos visto como en los últimos días los mercados financieros han superado algunas pruebas importantes. El consenso europeo para avanzar hacia la unión bancaria, la bajada de tipos en Australia y en China, el buen PIB de Australia en el primer trimestre, y el buen resultado de la arriesgada subasta de bonos que realizó el Tesoro español el pasado jueves, han propiciado fuertes rebotes en todas las Bolsas. Rebotes que son importantes, porque, como señalábamos en nuestro comentario anterior los índices, sobre todo el futuro del S&P, estaban en niveles críticos, cuya ruptura a la baja habría tenido implicaciones muy negativas en el corto plazo.

De esta forma, la apuesta por el Eurostoxx 50 que hacíamos en nuestro anterior comentario ha sido acertada y también lo ha sido la salida de las posiciones bajistas del S&P y del euro/dólar. En la semana el Ibex 35 ha subido un 8%, y el Eurostoxx 50, el Dow y el S&P han subido un 3,6%. Curiosamente el Dax ha sido el peor índice europeo, con una subida del 1,3% y el Nikkei ha subido solo muy ligeramente. 

Tras estos avances, la enorme sobreventa de los mercados se ha corregido en parte, sobre todo en el sector bancario europeo, que ha disfrutado de alzas espectaculares. 

Pero ha habido otro dato importante en los mercados esta semana, que es el giro a la baja en el bono alemán. El bund, que había llegado a un tipo del 1,13% la semana pasada, empezó a recortar el miércoles por la tarde y cerró el viernes en un tipo del 1,33%. La lectura directa que podemos hacer es que los temores de ruptura del euro se han relajado, ya que el bund se ha convertido en el indicador más fiable del miedo a la ruptura del euro. A mayor riesgo de ruptura, más dinero fluye al bund buscando el refugio de los futuros nuevos marcos alemanes. Por eso es importante el giro a la baja del bund.

A lo largo de la semana hemos ido teniendo noticias sobre la evolución de la economía global. La debilidad de la zona euro ha quedado patente en el PMI compuesto de manufacturas y servicios, en 46 puntos frente a los 46,7 de abril, indicando el mayor ritmo de contracción de los últimos tres años. La bajada de tipos china de un 0,25% al 6,31% también es signo de desaceleración en la gran economía emergente. Solo Australia ha dado buenas noticias con su magnífico crecimiento en el primer trimestre del año. Pero dentro de un escenario global de debilidad que quedó también reflejado en las palabras de Bernanke el miércoles y de Draghi el jueves.

Sin embargo, a diferencia del verano pasado, estas noticias han tenido poca incidencia, porque el foco no está ahora en una posible desaceleración económica que las Bolsas ya han descontado, sino en la situación del sector bancario europeo, y más en particular, en este momento, del español. De ahí las fuertes subidas de valores bancarios (Santander y BBVA subieron más de un diez por ciento) al calor de los avances en la posible unión bancaria europea, que al establecer un seguro de depósitos a escala europea, eliminaría el riesgo de fuga de depósitos hoy real en varios sistemas bancarios de la zona. 

Es verdad que la unión bancaria exigirá, al final, unión fiscal y unión política, pero en Europa el procedimiento siempre ha sido el de avanzar paso a paso, y a falta de un plan global es bueno ir completando, aunque sea poco a poco, el puzzle.

La solución dada al caso español, a través de la línea de crédito acordada el sábado, es también una buena noticia para la estabilidad de la banca europea, que es lo más urgente, ya que sin dicha estabilidad no hay crecimiento posible, y lo que sí hay son riesgos de posibles cortocircuitos o colapsos financieros, con el consiguiente escenario de ventas en cascada. Desde esta perspectiva el acuerdo de asistencia financiera para la banca alcanzado el pasado sábado por España y la Unión Europea es una buena noticia y debería ser bien recibida por los mercados, ya que aleja el fantasma de una reestructuración desordenada en la banca española, que habría tenido repercusiones muy negativas en nuestra Bolsa, dadas las interrelaciones y cruces accionariales existentes. 

Nuestra impresión es que las Bolsas van a seguir descontando bien el acuerdo en los próximos días y corrigiendo la sobreventa, lo que no significa, ni mucho menos, que vayamos a entrar de forma inmediata en una mercado alcista. El gran dibujo sigue siendo el de una economía llena de temas pendientes de resolución y el de unos mercados financieros inestables, con turbulencias recurrentes. Pero, como pasó con el LTRO o con otros avances positivos, ahora toca celebrar un poco el hecho de que la banca española vaya a poder reestructurarse de forma más o menos ordenada.

Pensamos que los cuestionados líderes europeos, una vez más al borde del precipicio, darán a lo largo de junio algunos pasos en la buena dirección, y sabrán manejar con el menor daño posible el escenario electoral que salga de las elecciones griegas

Esta semana tenemos vencimiento trimestral de futuros y opciones, lo cual siempre mueve el mercado. Pero tras un trimestre tan intenso, apostaríamos más bien, aun a riesgo de equivocarnos, por una continuidad de las alzas para esta semana, aunque tal vez más moderadas. 

Nos mueve a ello el ya mencionado giro que se ha producido en los bonos alemanes, así como la situación del futuro del S&P, que ha rebotado justo en los niveles críticos de la media de las doscientas últimas sesiones, cerrando el pasado viernes en los 1.329 puntos, es decir, cómodamente por encima de los 1.300, y también el rebote del euro frente al dólar

Dados los niveles de sobreventa a los que se había llegado, que solo se han corregido parcialmente la semana pasada, nuestra idea es que podrían seguir cerrándose posiciones cortas, provocando subidas adicionales, si bien, a nuestro juicio, moderadas.
Juan Carlos Ureta
Presidente de Renta 4

sábado, 9 de junio de 2012

Perspectivas Semanales

De cara a la próxima semana, no conoceremos un gran número de datos. Estos, además, se centrarán en referencias de inflación de mayo, tanto en EEUU como en la Eurozona

También se darán a conocer la producción industrial de Francia y Reino Unido, después de que las de Alemania y España cayeran más de lo previsto. Una vez publicados estos datos, el miércoles veremos la de la Eurozona, con una caída prevista de -1%. 

El viernes también se dará a conocer la producción industrial de mayo en EEUU, se espera una moderación significativa en la tasa de crecimiento, y la primera encuesta manufacturera de junio (Nueva York), con esperada ralentización. 

También se espera retroceso en el dato preliminar de junio de la Encuesta de Confianza de los Consumidores de la Universidad de Michigan. 

En Japón destacamos la producción industrial final de abril y la reunión del BoJ, sin que se espere que modifique los tipos. 

En cuanto a mercados, para la semana entrante seguiremos pendientes de las noticias sobre el rescate a los bancos españoles

lunes, 4 de junio de 2012

RESPONDEMOS A TUS PREGUNTAS

Hola ¿me podrían decir cómo evolucionará el IBEX. La situación es tan mala como para caer tanto?
Eduardo G., Astorga

La situación sí que es muy delicada. Estamos en lo que se llama un círculo vicioso: hay que corregir el déficit lo que hace generar ajustes, los ajustes reducuen el crecimiento, si se reduce el crecimiento se recauda menos y si se recauda menos se incrementa el déficit.

Una solución es inyectar liquidez aunque hemos visto en 2009 y 2010 sobre todo, que eso dura poco.

La otra solución es recortar en aquello que es superfluo (autonomías, embajadas, televisiones, etc.) así hasta que no se necesite recortar más y se ajusten los presupuestos.

La situación sería muy dura a corto plazo pero es la única forma de recuperarse para el largo plazo.
Por otro lado le muestro el gráfico a escala mensual, es decir, cada barra que ve usted es un mes. Estos gráficos son muy interesantes pues a largo plazo es más difícil manipular el mercado.

En primer lugar vemos que la tendencia alcista que viene desde el año 1992 ha sido perdida, con lo cual ahora mismo la tendencia es bajista. Para anular esta situación el IBEX tendría que recuperar la línea perdida que ahora mismo pasa por el 7.900.

Por otro lado se puede ver cómo se pueden ver 2 movimientos a la baja.
1. desde los máximos de 16.000 a los 6.700 puntos
2. Desde el 9.300 según la teoría del módulo de Elliot sería de igual impulso lo que nos daría un objetivo de 5.200 puntos que coincide con los mínimos de 2003.

En cualquier caso al ser gráficos a escala mensual esto no va a ocurrir ya, puede haber un rebote muy fuerte y retrasarse este objetivo unos meses.



Un saludo.

El presente informe no presta asesoramiento financiero personalizado. Ha sido elaborado con independencia de las circunstancias y objetivos financieros particulares de las personas que lo reciben. El inversor que tenga acceso al presente informe debe ser consciente de que los valores, instrumentos o inversiones a que el mismo se refiere pueden no ser adecuados para sus objetivos específicos de inversión, su posición financiera o su perfil de riesgo ya que éstas no han sido tomadas en cuenta para la elaboración del presente informe, por lo que debe adoptar sus propias decisiones de inversión teniendo en cuenta dichas circunstancias y procurándose el asesoramiento específico y especializado que pueda ser necesario.

domingo, 3 de junio de 2012

Próximo seminario: ¿Cómo nos afecta la renta fija?


El próximo ponente es Miguel de Juan, Asesor del Fondo de Inversión Argos y un leonés que toda su vida profesional ha estado vinculado al mundo de la banca privada. El pasado jueves 31 de Mayo, de Juan presentó su libro titulado: "El lemming que salió raro".

En el seminario nos hablará de la importancia de la renta fija en nuestras inversiones: por qué no invertir en un fondo de inversión garantizado, cómo afecta la prima de riesgo a la deuda soberana, la seguridad y garantía de los depósitos y los pagarés de empresas, el polémico asunto de las preferentes o la conveniencia de invertir en Letras del tesoro...

Si estás interesado, ya sabes, comunícalo al Aula porque las plazas son limitadas. 

Fecha: Martes 12 de Junio a las 20h.

Lugar: Salón de actos de la Cámara de la Propiedad Urbana de León.
C/ Santa Nonia 6 - bajo.

Lo puedes hacer por teléfono: 987 219620 o por correo electrónico: